sábado, 27 de enero de 2018

7 frases extraordinarias de la película «Wonder» (2017)




Basada en el best seller internacional de R.J. Palacio, «Wonder» presenta la historia de un niño extraordinario: Auggie Pullman. Luego de nacer con una deformación facial, veintisiete cirugías faciales le permitieron oler, ver y escuchar con mayor claridad, sin embargo nunca pudo experimentarse como un niño común y corriente. La ayuda de sus padres y su hermana le permitieron aventurarse con mayor seguridad en su primera experiencia escolar. Luego de haber recibido una educación en su propio hogar asumió el reto de asistir a una escuela. Es ahí donde prueba por primera vez la experiencia de la amistad y la gentileza, pero también la de la crueldad y los prejuicios humanos.

Desde un personaje sumamente frágil, R.J. Palacio presenta ante el mundo la realidad de la fragilidad, las luchas interiores y la necesidad de la fraternidad y la gentileza. A continuación te presentamos algunas frases, o “quotes”, seleccionados del guión de la película que nos pueden ayudar a redescubrir ciertos valores y verdades que, por cierto, participan de la maravilla de la vida según el Evangelio que vino a proponernos el señor Jesús:

1. «Cuando se tengas que escoger entre ser correcto y ser gentil, escoge ser gentil».


Este es un de los preceptos, o regla para cosas importantes, que el profesor Browne escribía en la pizarra de la sala de clases para conversarlo con los niños y explicárselos. Considerando que la gentileza auténtica no se puede oponer nunca al bien y la justicia, este precepto eleva las exigencias de un moralismo únicamente centrado en el deber y en no hacer el mal e invita a que las acciones se bañen de un extra de amor, de caridad, de solidaridad creativa y fresca con cada persona. Pone el amor a las personas por sobre todo lo demás.

2. «No te puedes mimetizar con el grupo cuando naciste para sobresalir».


Con estas palabras Via Pullman, hermana mayor de Auggie, lo invitaba a no andar comparándose y esforzándose por ser como los demás cuando la maravilla de su vida y su misión radicaba en brillar desde su unicidad y autenticidad. Gran consejo para todos. Muchas veces gastamos nuestra energía en cumplir con todas las exigencias de los estándares sociales  y no logramos la paz, la alegría y la serenidad. Otras veces menospreciamos nuestros propios dones y talentos pensando únicamente en lo increíble que sería ser como otros y olvidando que Dios nos ama de manera personal y nuestra felicidad está en amarlo y amar a los demás dando todo lo que tenemos. La parábola de los talentos es una gran enseñanza para este punto. Además, como cristianos, esta frase nos recuerda aquella invitación del Señor a estar cerca de Él para llenarnos de su luz y así poder ser luz del mundo. Una luz que no debe dejarse vencer por el miedo ni por criterios mundanos sino que debe ponerse sobre lo alto para brillar ante los hombres.

3. «No eres feo y quien se preocupe por conocerte lo descubrirá».


Este comentario lo hace la mamá a Auggie para hacerle descubrir su verdadero valor y su verdadera belleza. Por su deformación facial el niño se llegaba a sentir muchas veces como un monstruo. Es ahí donde su mamá sale amorosamente al encuentro para recordarle que la verdadera belleza humana es la del corazón. Nosotros sabemos que esa belleza se debe a que somos creados a imagen y semejanza de Dios y además podemos asemejarnos a Su belleza por medio de la práctica del bien, la verdad, la justicia y sobre todo el amor. La belleza física , además de ser relativa, puede desaparecer o cambiar. Como enseñó el Papa Francisco: «El corazón no se puede photoshopear». Y en él radica la belleza de todos los seres humanos. ¿Qué tan bella es nuestra vida a ese nivel? ¿Qué tan cercano está nuestro corazón a la belleza infinita de su creador?

4. «Tus acciones son el reflejo de tu vida».


Este es otro precepto del profesor Browne. Se parece mucho al famoso «por sus frutos los conoceréis» del Evangelio. Podemos sentir y pensar muchas cosas buenas y bonitas, pero es fundamentalmente en nuestros actos donde se juega nuestra vida y estos siempre rebozan de lo que hay en el corazón. La fe no debe vivirse únicamente de palabra sino que debe ser informativa, para cambiar nuestra mentalidad, y performativa, para cambiar nuestra vida. Las acciones se encargan de escribir nuestra historia y la de los demás.

5. «¿Quién aspiro ser? Esa es la pregunta que debiéramos hacernos todo el tiempo».


Otra vez el gran profesor Browne invita a la reflexión personal y a la necesidad de preguntarle siempre a nuestro interior : ¿A dónde vas? Esto nos llevará a reconocer nuestras intenciones más profundas y ver si son las óptimas o no. Muchas veces es necesario recalcular la dirección de nuestra vida, tantas veces zarandeada por vientos y corrientes fuertes. Como nos enseña el Señor Jesús: «Donde está tu tesoro ahí estará tu corazón». ¿Es la santidad el ideal que ordena y encausa toda nuestra vida? Si no es así, ¿qué otra cosa ha ocupado el lugar principal en tu interior?

6. «Creo que debería haber una regla para que todos sean ovacionados al menos una vez en sus vidas».


Esta frase de Auggie refleja uno de los mensajes centrales de la obra: lo extraordinario de lo ordinario. La vida y sus retos y luchas diarias es presentada como una gran tarea realizada con esmero y grandeza por muchos de manera anónima. Esta frase nos invita a valorar y ver con otros ojos los esfuerzos de los demás y los propios por hacer las cosas bien. Sabemos como cristianos que ese reconocimiento a las opciones más profundas del corazón se dará frente al Señor cuando, según su promesa, Él dé a cada uno según su corazón.

7. «Sé amable porque todos están librando una batalla, y si quieres saber lo que los otros son solo tienes que mirar».


Esta frase invita nuevamente a la amabilidad y la hace más necesaria en vistas a algo que se relaciona con el punto anterior: cada vida es una batalla. Por lo tanto cada uno es un combatiente que necesita siempre de una sonrisa, una mano tendida y ánimo para continuar. Esta atención requiere ser reverentes, es decir, primero saber mirar lo más profundo, valioso y significativo del otro para luego poder interactuar en términos de comunión y servicio.
Que estas frases y que esta película te ayuden a reflexionar sobre el gran regalo de la vida, los dones que has recibido, la importancia de cada momento y cada persona, la importancia de la gentileza y lo extraordinario escondido en lo más ordinario y frágil de la vida.

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